Hipertensión

¿Es usted hipertenso?
¿Cuándo fue la última vez que se chequeo la presión arterial?
¿Tiene familiares Hipertensos?

Estas son algunas de las preguntas que se debe hacer antes de dar el primer paso y conocer sobre este padecimiento, Para la OMS es un problema grave de salud que afecta a 600 millones de personas y causa 3 millones de muertes al año en todo el mundo. Es una patología frecuente entre la población adulta, estimándose que alrededor del 25-30 % de la misma a nivel mundial la padece.

La hipertensión arterial es un problema de salud pública importante, al ser una patología inicialmente silente muchos no nos preocupamos por saber si la padecemos o no y esperamos hasta tener alguna consecuencia que muchas veces puede ser mortal. Para diagnosticar que una persona es hipertensa hay que tomar la presión arterial en más de una ocasión, por personal capacitado, considerando un ambiente agradable, en silencio, sentado, con 5 minutos de reposo y con un aparato correctamente calibrado, la media de dos ó más medidas correctas, en la cual se encuentre una tensión arterial mayor de 140/90 mmhg se considera diagnostico de hipertensión arterial.

Los pacientes con pre hipertensión ósea aquellos que no llegan a diagnosticarse como hipertensos pero que no tienen una presión óptima,  tienen un riesgo incrementado para el desarrollo de hipertensión arterial; los situados en cifras de 130-139/80-89 mmHg tienen doble riesgo de presentar hipertensión arterial que los que tienen cifras menores. Los individuos normotensos mayores de 55 años tienen un 90 % de probabilidad de riesgo de desarrollar hipertensión arterial. La relación de presión arterial y riesgo de eventos de enfermedad cardiovascular es continua, consistente e independiente de otros factores de riesgo. La presión arterial alta significa la mayor posibilidad de ataque cardíaco, insuficiencia cardíaca, ictus y enfermedad renal. Para individuos de entre 40 y 70 años, cada incremento de 20 mmHg en presión arterial sistólica ó 10 mmHg en presión arterial diastólica dobla el riesgo de enfermedad cardiovascular en todo el rango de 115/75 hasta 185/115 mmHg.

Ensayos clínicos han demostrado que un control efectivo de la presión arterial se puede conseguir en la mayoría de los pacientes hipertensos, pero la mayoría precisará dos o más fármacos antihipertensivos. Cuando los médicos fallan en los consejos sobre estilos de vida, dosis inadecuadas de antihipertensivos ó combinaciones adecuadas de fármacos, puede resultar un control inadecuado de la presión arterial. La adopción de estilos de vida saludables en todo el mundo es imprescindible para prevenir la elevación de presión arterial y es indispensable en hipertensos. La modificación de los estilos de vida más importantes bajan la presión arterial, incluyendo reducción de peso en obesos y sobrepeso, incluyendo la dieta DASH  rica en potasio y calcio, reducción de sodio en la dieta, actividad física y moderación en consumo de alcohol. La modificación de estilos de vida reduce la presión arterial, aumenta la eficacia de los fármacos antihipertensivos y disminuye el riesgo cardiovascular.

LA DIETA DASH

  • Granos enteros (6 a 8 porciones diarias)
  • Vegetales (4 a 5 porciones diarias)
  • Frutas (4 a 5 porciones diarias)
  • Leche y productos lácteos con un contenido bajo en grasa o sin grasa (2 a 3 porciones diarias)
  • Carnes magras, ave y pescado (6 ó menos porciones diarias) Nueces, semillas y leguminosas (4 a 5 porciones diarias) Grasas y aceites (2 a 3 porciones diarias)
  • Dulces, preferiblemente con un contenido bajo en grasa o sin grasa (5 ó menos por semana)
  • Sodio ( no más de 2.300 mg al día
  • Ejercicio aeróbico (caminar, ejercicios cardiovasculares por lo menos 3 veces a la semana 30 minutos diarios.)

La mayoría de los hipertensos requieren dos o más medicaciones antihipertensivas para conseguir sus objetivos de presión arterial. La suma de un segundo fármaco de diferente clase debería iniciarse cuando la monoterapia en dosis adecuadas falla para conseguir el objetivo de presión arterial. Cuando la presión arterial es mayor de 20/10 mmHg sobre el objetivo, se debería considerar iniciar la terapia con dos fármacos, bien como prescripciones separadas o combinaciones en dosis fijas. Otros factores de riesgo cardiovascular deberían ser tratados para sus respectivos objetivos, y el abandono del tabaco debería ser promocionado vigorosamente.